Chubut, Neuquén y Río Negro invertirán 50 millones de dólares en una infraestructura estratégica para garantizar el acceso al gas en la región. “Es un grito federal que se escucha desde el sur”, destacó el gobernador Ignacio Torres.

En un acto celebrado este viernes en Rawson, los gobernadores de Chubut, Ignacio Torres; de Neuquén, Rolando Figueroa; y de Río Negro, Alberto Weretilneck, anunciaron el inicio de la ampliación del Gasoducto Cordillerano Patagónico, una obra clave que beneficiará a miles de familias en la región.


El proyecto contempla la instalación de dos nuevas plantas compresoras en Gobernador Costa y Alto Río Senguer, con una inversión conjunta de 50 millones de dólares, financiada por las tres provincias con fondos propios. La obra será ejecutada por la empresa Camuzzi Gas del Sur y permitirá incrementar la capacidad de transporte del gasoducto en 300 mil metros cúbicos diarios.


Una decisión política
“Después de 20 años, estamos concretando una obra fundamental que ya tiene un 80% de avance. Para agosto finalizaremos la conexión con el Gasoducto San Martín”, explicó Torres, quien remarcó que el objetivo es evitar los problemas de suministro que cada invierno afectan a miles de hogares.
El gobernador de Chubut subrayó el carácter estratégico de la inversión: “Es una obra que no se ve, pero que cambia la vida de muchas personas. Decidimos no esperar más y asumir el desafío, con un esquema de financiamiento propio”.
Un reclamo histórico desde la Patagonia
Torres, Weretilneck y Figueroa coincidieron en la necesidad de una “reparación histórica” para la región, que produce buena parte del gas, petróleo y energía eléctrica del país, pero aún tiene comunidades sin acceso a servicios básicos.
“El país no puede mirar para otro lado. Mientras producimos la mitad de las divisas que necesita la Argentina, todavía hay pueblos sin gas”, reclamó Torres, quien habló de “una injusticia que debemos poner sobre la mesa en el debate federal”.
Por su parte, Weretilneck valoró la insistencia de Torres para concretar la obra, y recordó que “la Patagonia aporta el 98% del gas, el 97% del petróleo y casi el 70% de la energía eólica del país”.
Figueroa calificó la obra como “una reivindicación histórica” y expresó: “Mientras otros se pelean en Buenos Aires, nosotros nos unimos para resolver los problemas reales de la gente”.
Impacto regional
Con las nuevas plantas, que ya fueron trasladadas desde Rosario a las localidades de instalación, el gasoducto pasará de transportar 1.200.000 a 1.500.000 metros cúbicos diarios. Esto permitirá ampliar el servicio a más de 12.000 hogares, incluyendo hospitales, escuelas e instituciones públicas en zonas de difícil acceso.
La obra cuenta con aval de Enargas, a través de las resoluciones 2877/03 y 442/24, y con un préstamo gestionado por los Bancos del Chubut y de Neuquén.